Todo lo que debés saber para emprender desde cero

María Teresa Pérez

¿Estás considerando comenzar un negocio y aún no tenés claro el panorama? ¿Te asalta la duda sobre qué hacer para iniciar? Hoy te compartimos una brújula sobre cómo emprender desde cero, pero con bases sólidas.

Para emprender se necesita materializar una idea de negocio con todos los retos que ello implique. Pues bien, el primer paso es precisamente hacer un estudio de mercado y quiénes serán tus clientes, recomiendan los economistas de la Fundación de Desarrollo Económico y Social (FUNIDES). Esto podés hacerlo vos y su importancia radica en que te indicará las posibilidades de éxito que puede tener tu emprendimiento. Estos son los aspectos a investigar:

• Análisis de tu competencia. Con esto la idea es encontrar cuál será tu valor agregado, el diferencial de tu producto o servicio en el mercado, qué vacíos existen que vos podés suplir.
• Entrevistas y/o encuestas. Así podrás tener una visión más clara de qué esperan los clientes de tu producto o servicio; confirmarás hipótesis o recibirás retroalimentación para finalmente sacar un producto o servicio más completo.
• Definir a tu cliente ideal. No se debe vender a todos; para tener éxito tenés que centrarte en un púbico objetivo, definirás edades, género, gustos, necesidades e intereses para complacer o solucionar algún punto de dolor.

Un tema que no podés obviar es el análisis de las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas (FODA), es decir, reconocer qué hace a tu negocio poderoso y qué aspectos necesitás mejorar, pero tenerlo claro te ayudará a crear una estrategia. Y muy importante, realizar un plan de inversión para determinar en cuánto tiempo se podría recuperar.

Para vos: 5 tips de oro para quien desea emprender

Recordá que las fortalezas y debilidades son relacionadas estrictamente a tu empresa, mientras que las oportunidades y amenazas son factores externos, en los que vos o tú negocio no pueden intervenir pero que debés saber para prepararte mejor (la pandemia, por ejemplo), o para aprovechar.

Tu modelo de negocio

Es esencial contar con un modelo de negocio que describe el hilo conductor de cómo una empresa crea, ofrece y captura valor. El modelo Canvas fue propuesto por Alexander Osterwalder en función de su obra Business Model Ontology. En él indica los bloques de construcción para las diversas actividades. Permite centrarse en la gestión operativa y estratégica y en el plan de marketing. Podés conocerlo a fondo aquí.

Formalidad es clave

Para FUNIDES “un emprendedor que considere que su negocio sea proveedor de empresas formales, requerirá algún nivel de formalidad, por ejemplo, estar inscrito como cuota fija (ante la Dirección General de Ingresos) para poder emitir facturas. Esto último también es útil para poder ofrecer en el negocio diversos medios de pago como POS”. Además, si en el futuro deseás optar a un crédito o financiamiento este paso será un requisito indispensable.

Estrategia de marketing y redes sociales

Muchos emprendedores dejan esta etapa como un plan de inversión posterior, sin embargo, esto es un error porque no podrás beneficiarte de los alcances que te ofrece el mundo digital para el crecimiento de tu negocio.

Una estrategia de marketing digital debe planearse como mínimo con seis meses de anticipación. En ésta deberás elegir cuáles son los canales que se ajustan a las necesidades de tu negocio. No es necesario que tengás presencia en todas las redes sociales, pero sí en las que se encuentra tu cliente ideal.

Con una estrategia de social media en la primera etapa conquistarás a tu audiencia con contenido de valor (información útil que le beneficia al utilizar tu producto o servicio). Luego inicia la conversión que aunado a una buena atención al cliente transformará a tu audiencia en embajadores de tu marca.

Pero todo esto implica constancia, perseverancia e inversión, con objetivos claros, alcanzables y medibles.

De una adecuada segmentación publicitaria en redes sociales resultará el reconocimiento de tu marca en la memoria del consumidor y posteriormente en las ventas.

Por otro lado, definir si tu negocio necesita un sitio web dependerá también de tus objetivos. Un portal te ayuda a que te encuentren con más facilidad a nivel local y que tus ventas se incrementen, pero deberás considerarlo desde tu plan de negocio, porque debe gestionarse con estrategia, para optimizar todo el alcance de este recurso.

Recordá siempre que cualquier canal de comunicación debe estar relacionado con el público al que querés llegar. ¿Está ahí mi potencial cliente?

Identidad visual corporativa

También conviene que prioricés tu identidad visual corporativa desde el principio. Esto va desde la creación de tu logo, pensado en colores y tipografías que expresen tus objetivos y se relacionen con lo que querés comunicar. Es importante que antes de hacerlo te planteés qué querés transmitir, cómo te gustaría que te perciban tus clientes, si te estás dirigiendo a una audiencia joven o adulta, si será formal o informal. Apoyate de la teoría del color para encontrar las tonalidades compatibles con tu segmento de mercado.

Una vez que tenés elegidos los colores de tu marca es momento de identificar los patrones y formas que contendrá toda tu comunicación y adaptarla a todos los formatos: artes publicitarios, videos, fotografías y papelería. Lo ideal es hacerlo con apoyo de un diseñador gráfico, pero si no pudieras hacerlo, te recomendamos hacer uso de herramientas gratuitas como Canva, que te brinda muchas alternativas de diseño que podrás personalizar con tus colores de marca.

¿Por qué esto debería ser tan importante? La comunicación visual puede ayudarte a posicionar tu marca de una forma más rápida y efectiva. Ciertos colores y formas crean emociones que determinan el proceso de compra. Por ejemplo, Coca cola, el gran referente de la publicidad, utiliza el color rojo, que transmite una sensación audaz, edificante y llena de energía.

Los siguientes enlaces te pueden ayudar:

https://color.adobe.com (para extraer paleta de colores).
https://www.rgbtohex.net/hextorgb/ (para pasar de color digital a impresión y viceversa)
https://fonts.google.com/ (para buscar y descargar fuentes gratuitas)
https://imagecolorpicker.com/es (para extraer color de una imagen)

La salud financiera de tu negocio

La adecuada gestión financiera es determinante para dirigir al éxito o fracaso de cualquier negocio y es una de las etapas en las que un emprendedor se puede ahogar fácilmente. Según FUNIDES, los resultados de la Encuesta de Empresas Sostenibles 2015 indican que, entre las micro y pequeñas empresas, el 58.6% lleva registros informales, ya sea anotando en un cuaderno o haciendo cuentas de manera espontánea sin tener nada escrito, y el 36.8% no llevaba cuentas del todo.

En estudios posteriores que FUNIDES ha realizado a nivel sectorial se observa la prevalencia de las cuentas informales. En el estudio sobre la “Situación del Sector de Panificación en 2019” se encontró que el 73.7% de los negocios encuestados de este sector en Masaya y municipios aledaños llevaba cuentas anotando en una libreta y el 12.1% no llevaba ningún registro.

Llevar cuentas no solo es importante para llevar un control de los ingresos y una estructura de costos clara, sino que también ayudaría a que los negocios que operan en las casas de habitación no mezclen los gastos/ingresos del hogar con los del negocio.

De acuerdo con los resultados del estudio “Situación del Sector de Panificación en 2019”, el 56.6 por ciento de los negocios encuestados se encuentra ubicado en la casa de habitación de los propietarios y el 36.4 por ciento en un local propio.

Este último punto es importante tenerlo presente al momento de emprender, si va a funcionar desde casa, hay que llevar los gastos aparte, para saber si está siendo rentable o no, y si se está pensando rentar un negocio, hay que ver las opciones disponibles en el mercado, por ejemplo, tiendas colaborativas que puedan ofrecer modalidades de pago más cómoda o sean contratos más cortos.

Aprendé aquí a separar las finanzas personales de las de tu negocio

El negocio en la práctica

Los primeros tres años son clave para administrar, posicionar y hacer crecer el negocio, pero si sentís que te deja más cansancio que utilidades definitivamente no se están haciendo las cosas bien. Aquí te comparto lo que debés hacer para que vos y el negocio se entiendan y triunfen:

1. Definite un salario. Aunque el negocio esté iniciando no hay justificación para no hacerlo. En el siguiente artículo, te explicamos el paso a paso para lograr definirlo.
2. Calculá cuánto le tendrías que pagar a alguien más para que hiciera lo que vos asumís en el negocio. Si no tenés idea de cuánto es lo adecuado, indagá cuánto pagan en promedio en empresas similares, o tomá como referencia el salario mínimo. Aunque el negocio aún no generara lo necesario para pagarlo, debés contabilizarlo en tu estructura de costos para que definás adecuadamente los precios.
3. Prorrateá tus prestaciones. Al igual que harías con otro colaborador, debés incluir en los costos del negocio las prestaciones laborales tales como aguinaldo, bono (si lo dieras) u otros beneficios adicionales al salario. Sumá esos montos y dividilos en partes iguales a lo largo del año para que se haga más sencillo lograrlo.
4. Reinvertí utilidades: Una vez hayás conseguido todo lo anterior, llegará el momento en el que la empresa generará ganancias, pero… ¿de quién son? Si sos único/a propietario/a pensarás: “mío”, pero recordá que ese dinero no es simplemente para comerlo o para usarlo en gastos personales que no pudiste hacer en todo el año, sino que una parte significativa debería ser para reinvertir. ¿Cuánto? Eso dependerá del margen de ganancia obtenido y de las necesidades del emprendimiento. Pero recordá: si no reinvertís, tu negocio nunca crecerá.

Si tenés alguna otra recomendación que pudiera ayudar a los negocios emprendedores, compartirlas en los comentarios, para dudas escribinos en nuestras redes sociales y con gusto te apoyaremos.

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