Con cada vez más frecuencia nos topamos con la noticia de mega incendios en áreas protegidas, deforestación al límite, contaminación de ríos y lagos y un largo etcétera. Seguramente muchas de esas veces que lo has visto en las noticias te lamentás y pensás que no hay mucho que podás hacer al respecto, pero… ¿realmente es así?
Empecemos por mencionar algo que no siempre tenemos presente y es que el deterioro ambiental tiene repercusiones sociales y económicas para todos, lo que implica que también todos podemos hacer cosas para aminorarlo.
¿Sabías que entre 2014 y 2018 se deforestó el 1.7%del área total de la Reserva Biológica Indio Maíz? Es la mayor proporción observada hasta ahora (en períodos anteriores había sido 0.4% y 0.2%), según el estudio Negocios Verdes, de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (FUNIDES).
¿Y qué tiene que ver esto con la economía? Que al estar en riesgo uno de los últimos grandes bosques primarios vírgenes de Centroamérica, peligra un importante reservorio de carbono, recursos hídricos valiosos, biodiversidad y riqueza cultural. Todo ello impacta en la sostenibilidad del país.
La Fundación ha dado seguimiento a este tema y uno de los datos más reveladores contenidos en sus investigaciones es que en desde la actualidad hasta 2080 la temperatura en algunas zonas del país podrían aumentar hasta 4 grados centígrados, es decir que los calores de los últimos meses serán “un juego” en comparación con esa proyección.
¿Qué significaría un aumento de esa magnitud? Empecemos por la parte productiva: muchos cultivos que actualmente hay en el país simplemente no podrían seguir, tales como el café (principal producto de exportación), la producción láctea caería dramáticamente, al igual que se vería afectada la producción de carne y derivados. A eso sumemos que al no tener reservas biológicas, el turismo que aún llega en busca de esas maravillas naturales, desaparecería.
Ahora, en cuanto a la economía personal, al haber mayores temperaturas se necesitaría mayor gasto de energía para equipos de climatización (imaginate pagar más por tu factura), productos más escasos y caros, menos empleo en muchos sectores que actualmente son de los principales generadores, más enfermedades al haber vulnerabilidad por no existir barreras naturales como bosques, climas más extremos. En fin, nada bonito a la vista.
En cuanto al tema medicinal, en la industria farmacéutica hay muchas misiones llegando a Centroamérica identificando recursos medicinales que les sirva a ellos para producir las curas de enfermedades que aún no la tienen, o de enfermedades que van a surgir. Si perdemos el último bosque primario que tenemos, corremos el riesgo de perder valores futuros”, explica FUNIDES.
Como podés ver, esto no es un tema ambiental, sino que debería ser un tema de interés nacional. Tanto por los aspectos sociales, como por los económicos.
¿Qué podemos hacer por nuestro lado?
Aunque sea duro reconocer, todos somos parte del problema: desde el campesino que corta más árboles para hacerlos leña hasta, los citadinos que para todo usamos empaques desechables, bolsas, generamos desecho en exceso y usamos el vehículo (moto o auto) hasta para ir a la pulpería más cercana. Y está comprobado que mientras mayor es el poder adquisitivo de la persona, mayor su huella ecológica.
Para reducir este impacto hay muchas cosas que podemos hacer, aunque parezcan pequeñas. Empecemos por plantearnos una pregunta en el día a día: ¿es necesario?
¿Es necesario que use el vehículo, pudiendo caminar o usar tomar bicicleta?, ¿Es necesario comer tanta carne?, ¿Es necesario usar tantos empaques plásticos? Y así en todo, para fomentar un consumo más consciente. A la larga, nuestro bolsillo lo agradecerá, pero sobre todo el ambiente y nuestras futuras generaciones, que son quienes heredarán este deteriorado país que estamos dejando.
Pensemos que la Tierra es un barco y tiene una cantidad limitada de recursos, y si nosotros lo comemos todo hoy, no dejamos nada para las futuras generaciones”, agrega FUNIDES.
Te recomiendo dar una leída a la investigación Negocios Verdes, pues nos plantea varias alternativas económicas para garantizar el financiamiento de la conservación de la Reserva Biológica Indo Maíz, que también te compartimos aquí: