Finanzas Personales

Cómo hacer un presupuesto personal sencillo (y que podás cumplir)

¿Te has preguntado qué pasaría si la empresa en la que trabajás no tuviera un presupuesto? Seguramente más de una vez has escuchado que al hacer alguna solicitud de compra “van a ver, porque eso no está en presupuesto” y es precisamente porque ninguna organización –o país– funciona eficientemente sin un plan de gastos o presupuesto.

Lo curioso es que, a pesar que el presupuesto es el único que permite planificar, decidir y controlar cómo usamos nuestro dinero, a nivel personal casi no se usa. Mediante sondeos en redes sociales y las capacitaciones de educación financiera que realizamos, he notado que entre el 60% y 70% de las personas no presupuesta sus gastos de manera permanente (e incluso pasa en micros y pequeñas empresas).

Pero, si querés ver cambios reales en tu billetera, en tu cuenta bancaria y en tu calidad de vida, es necesario no sólo que sepás cuánto ganás, sino cuánto gastas y en qué gastas, cuánto debés y cuánto ahorrás. Y eso sólo vas a lograrlo a través de un plan de gastos permanente, es decir un presupuesto. Y hoy te compartimos una herramienta para que te ayudés con esa tarea. 😉

Para que empecés a cultivarte el hábito de presupuestar antes de gastar y mediante esa herramienta lograr una exitosa planificación y –mediante ese proceso– alcanzar tus metas, seguí estas recomendaciones:

1. El presupuesto debe hacerse escrito

Muchas personas dicen que tienen su presupuesto mental y que “nada se escapa” pero eso es imposible. Para que hagás correctamente un presupuesto debés poner todo por escrito, ya sea a mano o en computadora. Lo importante es que podás evaluarlo, consultarlo y ajustarlo cuando sea necesario.

Consultamos a nuestra comunidad en Twitter dónde elaboran su presupuesto y la mayoría se inclinó por el programa Excel y libreta/cuaderno.

Por ello, actualizamos nuestra plantilla de presupuesto personal, donde podrás ver tus gastos por mes, por quincena y el balance del año, pero además de eso:

✔ En cada uno de tus ingresos y gastos podrás ver cuánto aporta porcentualmente hablando.
✔ Tus gastos están agrupados por categorías, las que se convierten en un gráfico que te muestra qué se está llevando tu dinero, de manera que evalués si realmente querés darle ese peso en tu vida económica (estas categorías podés cambiarlas según tu tipo de gastos).
Cuando te des cuenta, por ejemplo, que los pagos en tarjetas se llevan el 30% de tus ingresos, tendrás un panorama distinto de tu situación.

Cómo hacer un presupuesto paso a paso

Normalmente escucharás que debemos sentarnos a hacer la lista de gastos que «queremos» y/o debemos hacer con nuestro dinero, pero según he notado, si no tenés el hábito de presupuestar, hacer el ejercicio de esa manera sólo dará como resultado el «presupuesto ideal» para vos, no el real.


Por tanto, para lograr que tu presupuesto funcione, te propongo hacerlo a la inversa: en lugar de pensar los posibles gastos que harás ese o el próximo mes, vas a tomarte el tiempo para enlistar –sin exclusiones o culpas– los gastos que normalmente hacés, incluyendo aquellos que no se vean tan lindos por escrito (vicios, gastos hormiga, entre otros).

Si tenés por costumbre guardar vouchers o facturas, revisalas e incluí los tipos de gastos más frecuentes que realicés; y si no los guardás, debés tomarte suficiente tiempo para recordar y apuntar todos tus gastos del mes, poniéndolos desde los más importantes e irrenunciables, hasta los menos importantes para vos. En ese orden.

Aquí es necesario que incluyás hasta las cosas que te parezcan más insignificantes, tales como el café o gaseosa de las tardes, taxis ocasionales, las salidas con amistades y familia, pago de parqueos y compras a vendedores ambulantes… todo. Absolutamente todo debés incluirlo si querés saber hacia dónde estás dirigiendo actualmente tu dinero y con base a ello hacer cambios en tus hábitos de consumo. ¿No recordás exactamente cuántas veces pagaste parqueo? Podés calcular un aproximado según la frecuencia con que realizás ese gasto durante el mes.

Es hora de comparar tus gastos reales

Una vez que tengás por escrito todos tus gastos frecuentes, comparalos con todos tus ingresos netos, es decir, aquello que percibís luego de las deducciones correspondientes, remesas, pensiones y cualquier otro ingreso.

❌ Un error común es mentalizar  nuestros ingresos sobre la base del salario bruto (lo que dice el contrato, pero al cual se restan impuestos), lo que provoca que nuestros gastos sean más elevados de los que realmente podemos costear.

Por ejemplo: una persona que tiene como salario C$15,000 no recibe esa cantidad, sino que poco más de C$13,000 una vez se deduce INSS e IR. Estamos hablando de una diferencia de casi C$2,000 que, si no la tomás en cuenta, podría afectar seriamente tus finanzas.

Cuando comparés tus gastos versus ingresos te darás cuenta de tu realidad: ¿te sobra o te falta? En la mayoría de casos hace falta, sobre todo porque casi nunca en esos gastos se incluye el ahorro ni los gastos variables.

Si hace falta dinero, ¡a depurar!

Si al hacer el ejercicio anterior te das cuenta que te hace falta dinero, es necesario depurar. Suena fácil pero esta resulta ser precisamente la parte más difícil. ¿Cómo podés lograrlo? Dividí tu lista de gastos en dos: cosas necesarias (indispensables para vivir, como la comida y techo) y los deseos o no indispensables (cosas que nos dan placer o bienestar, pero que realmente no son indispensables para vivir, como el internet, suscripciones o recreación, etc).

A la hora de recortar gastos dirigite primero a tu lista de gastos en deseos y en ella también establecé un orden jerárquico. Dentro de lo «menos importante» también hay prioridades, ¿verdad? Entonces tratá de quedarte con las cosas que te hagan más feliz. El resto puede esperar.

Si te rehusás a recortar gastos la única forma que te queda para balancear tu presupuesto es aumentar tus ingresos. Por muy poco que parezca que puede generar un trabajo o negocio extra, todo suma.

Dividí tus pagos grandes en partes iguales

Aunque los gastos los enlistemos por mes, si tus ingresos son quincenales o catorcenales (o semanales en algunos casos), entonces esa lista preferiblemente debemos dividirla entre los pagos que recibimos en el mes.

Cuando hagás esto evitá cometer el error común de aplicar, por ejemplo, en una sola quincena el ciento por ciento de un pago grande. Te explico: si pagás los 20 de cada mes 150 dólares por un préstamo de vehículo, no lo incluyás solo en tu presupuesto de la primera quincena, te recomiendo dividir la cuota en partes iguales para las dos quincenas del mes, es decir: 75 y 75.

¿Por qué? Así te evitás la sensación ficticia de holgura en tus gastos de la segunda quincena, lo que provoca únicamente crearnos un nivel de consumo inapropiado que no podremos cumplir en la primera quincena, lo que podría llevarnos a usar formas de financiamiento para lograrlo, financiamiento que luego se nos dificultaría pagar.

Cómo presupuestar los gastos variables

Cuando hagás el presupuesto deberías tomar en cuenta aquellos gastos que no son mes a mes, sino con otra periodicidad (cada 3, 6 ó 12 meses, por ejemplo), tales como mantenimientos, impuestos, seguros, compras para el hogar, entre otros.

Lo ideal es que dividás cuánto tendrías que separar cada mes para esos gastos e incluirlos en tu presupuesto. De este modo garantizás tener el fondo cuando se requiera y no tendrías que recurrir al crédito para cubrirlo o extralimitar tus gastos cuando se den.

Si no lo revisás, trabajaste en balde

Para que el presupuesto realmente sirva para controlar tu dinero, no puede ser estático; debés revisarlo y actualizándolo con frecuencia, verificando si realmente gastaste lo que tenías previsto. Este ejercicio te servirá para ajustarlo de modo que podás cubrir tus necesidades y alcanzar tus metas.

Como podés observar, hacer un presupuesto es sencillo; lo que no siempre es sencillo es adquirir el hábito de hacerlo y cumplirlo, pero recordá que será el medio con el cual lograrás ir tomando mejores decisiones y cumplir lo que te has propuesto.

Gisella Canales Ewest

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