El 2020 trajo demasiados cambios, no solo en la forma de relacionarse entre personas, sino en la forma de comprar y de interactuar con nuestros productos financieros: ahora utilizamos más las transacciones digitales, a través de internet, lo cual nos trae numerosos beneficios de ahorro de tiempo y dinero en transporte, pero que nos exige saber resguardar nuestra información, manejarla confidencialmente y no compartirla con otros, para evitar fraudes.
Hablemos con claridad: así como cuidás tu dinero físico y tomás todas las medidas requeridas para que este no peligre, igual debe ser con tu dinero digital, ¿o acaso dejás tu billetera en algún lugar público pensando que no perderás dinero?, no, ¿verdad? Entonces de la misma forma debés prevenir en el mundo online.
Pero también hay una contraparte que debe aportar a que esas transacciones sean seguras y que se pueda detectar cualquier intento de fraude: el banco. Y para saber qué realizan exactamente, entrevistamos a Ana Chamorro, Gerente de Transformación Digital de BAC Credomatic, quien nos detalló las medidas que implementan.
Las primeras herramientas son las que las instituciones brindan directamente al usuario, como son las credenciales personales y secretas que solo el cliente conoce, de banca en línea o Banca Móvil, su usuario y un número de identificación personal (PIN) o contraseña, que debe ser personalizado.
Adicionalmente se promueve la utilización del Doble Factor de Autenticación mediante dispositivos de seguridad en línea como Código BAC, Token o tarjetas de coordenadas, y el uso de OTP (siglas de One Time Password), que son códigos numéricos de un solo uso. Todos ellos son de uso exclusivo del usuario, que nunca deben compartirse a otras personas.
La institución financiera además cuenta con:
¿Qué podés hacer vos para cuidar tu información en línea? Lo esencial es NO compartir tus accesos, contraseña o cualquier información personal, por mucha confianza que tengás con alguien.
Asimismo, recordá que por ninguna razón el banco te pedirá esta información, ni por llamada ni por correo electrónico o por ningún otro canal.
En este artículo te detallamos cómo operan las estafas en línea actualmente, para que tomés tus debidas precauciones y no caigás en estos intentos de estafa.
Adicionalmente, te sugerimos siempre verificar que estás utilizando los canales oficiales del banco del que seas cliente, no te confiés por enlaces que veas en redes sociales, aunque te prometan “el cielo y la tierra”.
Si seguís estas recomendaciones te evitarás muchos dolores de cabeza:
Adicionalmente, si recibís comunicación aparentemente de tu banco pero que te genere dudas, contactá a Servicio al Cliente para solicitar más información de inmediato.
También recordá no comprar en páginas web de dudosa procedencia y evitá navegar en sitios que no sean confiables.
Aquí podrás hallar muchas más recomendaciones para que tus transacciones en línea sean más seguras y evités pérdidas de dinero por un descuido.
Aunque las modalidades de estafa han escalado al mundo digital, hay formas de evitar caer en su trampa. Recordá siempre estar alerta.
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Con la nueva modalidad de que ahora basta poner la tarjeta en la máquina post para procesar un pago, cualquiera puede pasar la tarjeta para pagar una transacción, entonces debería de implementarse como seguridad adicional del tarjeta habiente que el dueño de la tarjeta ingrese un código adicional personal para que se procese el pago.
Hola César
Gracias por tu comentario.
Saludos