Cada cierto tiempo veo reabrirse el debate sobre si es mejor tener hijos siendo bastante joven, o ya en plena adultez, lo que lleva a la pregunta: ¿hay una edad ideal para ser madre?
Empecemos con un hecho, sustentado por múltiples estudios: existe una relación directa entre el embarazo adolescente y dificultades económicas. Entiéndase embarazo adolescente como aquel que se produce entre la pubertad (que cada vez es más temprana) y la recta final de la adolescencia, que según la Organización Mundial de Salud es a los 19 años.
Nicaragua es uno de los cuatro países de la región con mayores tasas de fecundidad adolescente, junto con República Dominicana, Guatemala y Honduras, según reportes del Banco Mundial.
“Las adolescentes embarazadas son más vulnerables y más pobres que adolescentes que no tienen hijos”, sentencia el Banco Mundial. (Ver artículo aquí). Esto debido a que al asumir esa responsabilidad a temprana edad, en la mayoría de los casos las madres adolescentes tienen menos probabilidades de culminar sus estudios de secundaria, reduciendo los años de escolaridad y las horas laborales.
Entonces, si tener hijos a muy temprana edad no es bueno, ¿cuál es la edad idónea? Para saberlo vamos a desmenuzar tres aspectos: el físico, el psicológico/emocional y el económico.
Físicamente: ¿a qué edad es mejor ser madre?
En general, según distintos estudios, se ha llegado a la conclusión que biológicamente hablando es preferible tener hijos antes de los 35 años.
La ginecóloga y obstetra Marcela Urroz de Bethel Diagnóstico Especializado, explica que físicamente hablando , la mejor edad para ser madre es entre los 25 y 35 años.
«Se espera en esta edad suficiente carga ovárica, con menos riesgo de malformaciones fetales y enfermedades maternas», explica.
Para quienes apuestan por ser madre más joven, deben saber que “las niñas de 15 a 19 años tienen el doble de probabilidades que las de más de 20 de morir en el parto o el embarazo y la tasa de mortalidad de sus neonatos es aproximadamente un 50% superior”, explica la organización humanitaria Plan Internacional.
Psicológicamente y emocionalmente, ¿qué edad es mejor?
Consultamos a la psicóloga clínica, Alba Roni, y aclaró que la edad biológica no siempre guarda relación con la edad mental y la edad emocional. Por tanto, aunque el cuerpo se encuentre en condiciones óptimas para concebir, eso no es garantía que esté preparada para asumir la responsabilidad de ser madre.
“Es importante que haya madurez clara sobre lo que representa tener un hijo el resto de la vida, económicamente, emocionalmente, la responsabilidad de educar, transmitir valores, estar conscientes que la ascendencia (los padres) influyen en la conducta de nuestros hijos, por eso es importante escoger de forma idónea para poder procrear (elegir la pareja), pues queramos o no cargamos con la historia de nuestros ancestros”.
Para tener certeza sobre la edad mental/emocional, debe hacerse una evaluación con un psicólogo
“Hay personas que aunque tengan 50 años podrían tener 14 años mentalmente (…) No tienen edad emocional suficiente para manejar sus emociones y mucho menos para lidiar con las emociones de un ser que tiene que educar y que tiene que transmitir y transferir esos valores, la madurez y la manera de enfrentarse a la vida”, agregó.
Económicamente hablando: ¿a qué edad debo tener hijos?
Alrededor de los 21 o 22 años una joven está culminando sus estudios universitarios y/o insertándose al mundo laboral, que, como es sabido, durante los primeros años de experiencia genera ingresos reducidos (en la mayoría de casos), por lo tanto, un embarazo a esa edad iría acompañado de condiciones económicas muy básicas, por no decir precarias.
¿A qué edad se puede contar con un empleo estable, que genere un ingreso de moderado a alto para tener la capacidad de –al menos– adquirir una vivienda y poder asumir gastos adicionales como educación? La respuesta puede variar según la profesión u oficio.
Si usamos de referencia las estadísticas del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) para saber a qué edad más mujeres están empleadas de manera formal (en empresas, con sus beneficios correspondientes), podemos observar que el 50.37% de las mujeres inscritas al INSS, tienen edades entre 25 y 39 años. Apenas el 1.13% de todas las afiliadas tiene entre 15 y 19 años, y el 9.29% tienen 20 y 24 años, inferior al 11.75% de las afiliadas que tiene entre 40 y 44 años, según el anuario estadístico de esa institución para 2020. Esto nos indica que las mujeres que gozan de un empleo formal en Nicaragua, no son las más jovencitas.
La estabilidad económica es un proceso no necesariamente rápido, por lo que –con base en mi experiencia con nuestra comunidad de lectoras y asesorías personales– puedo expresar que esta empieza a alcanzarse entre los 25 y 30 años, en promedio.
Esto no significa que ese rango de edad es el ideal económicamente hablando para tener hijos, pero sí considero que difícilmente antes de esa edad, exista la capacidad económica para asumir esa responsabilidad.
Como cada vida es distinta, al igual que cada bolsillo, para tomar la decisión de tener hijos, se debe evaluar si con los ingresos actuales, hay capacidad de asumir los gastos adicionales que conlleva tener un dependiente: alimentación, salud, educación, vestuario, principalmente, y si es posible ofrecerle las condiciones mínimas necesarias para su desarrollo, tales como una vivienda digna, alimentación balanceada, protección, seguridad y estabilidad emocional.
Hay quienes podrían tener esas condiciones a temprana edad, hay otras personas que lo lograrían mucho más adelante. Lo importante es conseguirlo, más allá de esa especie de competencia o prejuicios respecto a la edad, pues como has podido leer: la edad no es determinante.
Entonces, ¿cuál es la edad ideal para tener hijos? Aquella en la que biológicamente tu cuerpo ya esté listo, pero también aquella en la que ya contés con la capacidad económica para cubrir sus necesidades, y en la que estés preparada psicológicamente y emocionalmente para asumir tan grande responsabilidad.