Por qué la inflación casi no aumenta, pero veo todo más caro

Cada vez que vamos al mercado o al supermercado nos topamos con cambios de precios. Por muy pequeños que sean, 1 córdoba, 50 centavos, 10 centavos. Lo cierto es que notamos constantes variaciones en los precios de los productos que más adquirimos.

Esto provoca que nos parezca extraño que cuando vemos las noticias o leemos sobre los indicadores económicos, se hable de que “la inflación en Nicaragua se mantiene estable”, o que “bajó la inflación”. “¿Cómo, si yo veo todo más caro?”, es una pregunta frecuente y que aquí te ayudaremos a responder.

Empecemos por aclarar: ¿qué es la inflación? es el incremento en los precios de los productos y servicios, y se mide a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que debe estar basado en la estructura del consumo de los hogares nicaragüenses y adecuarlos a estándares internacionales que permitan ser comparables.

El IPC está compuesto por más de 500 productos, divididos en 12 categorías. A cada producto y categoría se le da una ponderación distinta, es decir, un peso distinto en su aporte total al Índice. La selección de esos productos a evaluarse se realiza con base en la Encuesta de Ingresos y Gastos de los Hogares (EIGH), de la cual muy poco o nada se sabe durante los últimos años. La última revisión de la estructura del IPC se hizo con base en datos de 2006.

“Dado que las estructuras de consumo final de los hogares cambian con el tiempo, es necesario renovar el conjunto de bienes y servicios que conforman la canasta del IPC, para lo cual se realiza una nueva que investigue sus patrones de consumo”, menciona el Banco Central de Nicaragua en la nota metodológica sobre el IPC, publicada en enero de 2010.

Sin embargo, desde entonces no sea actualiza, es decir que llevamos más de una década con una medición que muy probablemente ya no se ajusta a los patrones de consumo actuales.

Estas son las categorías que componen el actual IPC o inflación en Nicaragua, y el número de productos que integran cada categoría:

  • Alimentos: 140 productos.
  • Bebidas alcohólicas y tabaco: 10 productos.
  • Prendas de vestir y calzado: 45 productos.
  • Alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles: 37 productos.
  • Muebles, artículos para el hogar y para la conservación ordinaria del hogar: 57
  • Salud: 40 productos.
  • Transporte: 33 productos.
  • Comunicaciones: 9 productos.
  • Recreación y cultura: 49 productos.
  • Educación: 26 productos.
  • Restaurantes y hoteles: 18 productos.
  • Bienes y servicios directos: 59 productos.

Aquí podés encontrar las bases de datos de los productos que se utilizan para construir el indicador,

¿Cuál es el comportamiento que ha tenido ese IPC durante los últimos años? Aquí te compartimos:

Como podés ver, el indicador de la inflación en Nicaragua se ha mantenido alrededor de 3%-4% durante los últimos años, teniendo ciertos picos, pero regresando al rango. Se espera que la inflación acumulada durante todo el año cierre entre 4% y 4.5%.

Muchos podrían interpretar entonces que si algo se vendía a C$100, habría subido únicamente C$4 o C$5, pero no es del todo así, pues recordá que el peso de cada producto varía en la composición del IPC y no necesariamente vos consumís lo que más peso tiene en el IPC nacional.

En la estructura actual el mayor peso lo tienen los alimentos (más del 70%), y el precio promedio de estos se ha mantenido estable. Hacemos énfasis en la palabra promedio porque, aunque, por ejemplo, el queso haya subido, si los frijoles bajaron hay una compensación en ese promedio.

“Los precios de los alimentos se han mantenido relativamente estable a lo largo del año y esto se le suma la disminución que ha tenido los precios de los combustibles y derivados por la disminución del precio internacional del petróleo”.

Alvaro López-Espinoza, economista de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social, FUNIDES.

Tu realidad siempre es distinta

Volviendo entonces a la duda del por qué el indicador dice una tendencia y yo percibo otra, además de la falta de actualización de la metodología para calcular el IPC, juega un papel importante también tu propia canasta de consumo regular.

Si, por ejemplo, en tu hogar no se consume ayote ni chayote (productos contemplados en el IPC), pero sí consumen mucho brócoli, el IPC simplemente no estaría reflejando tu consumo personal, por tanto, aunque el ayote y chayote bajen de precio, si el brócoli aumenta, para vos el precio de los alimentos iría en aumento. Y así podemos continuar los ejemplos.

Recordá que en la población hay hogares con distintos niveles de ingresos, que tienen su propia canasta de consumo acorde a sus necesidades y preferencias, y desde su respectiva el peso de cada producto dentro de su gasto total, será muy diferente, lo que incide en esa percepción del comportamiento de los precios versus el comportamiento del IPC o indicador de inflación en Nicaragua.

“El Índice de Precios al Consumidor (IPC), es una de las estadísticas económicas más importantes de la economía, ya que permite medir la evolución de los precios de un conjunto de bienes y servicios representativos del gasto de consumo final de los hogares”, dice el BCN en la nota metodológica sobre el IPC, enero de 2010.

Respecto a si continúa siendo adecuada la actual estructura del IPC, Alvaro López-Espinoza, economista de FUNIDES Funides recomienda revisar la canasta de consumo y sus ponderaciones o peso que se le da a cada producto y categoría, ya que “estas pudieron haber tenido variaciones desde 2006”, por lo que debe actualizarse para tener un indicador más aproximado a la realidad.

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